
CUERPO DE BOMBEROS VOLUNTARIOS DEL PARAGUAY: GESTIÓN INTEGRAL DEL RIESGO DE INCENDIOS BASADA EN DATOS
De la respuesta a la prevención: construyendo resiliencia comunitaria ante amenazas de fuego
El Cuerpo de Bomberos Voluntarios del Paraguay (CBVP) ha evolucionado significativamente en los últimos años, transformándose de una organización centrada en la respuesta a emergencias hacia un actor integral en la gestión de riesgos de incendios. Con 140 cuarteles distribuidos en todo el territorio nacional y un sistema robusto de recolección de datos que registra más de 4,000 incendios anuales, el CBVP representa un ejemplo destacado de cómo las organizaciones voluntarias pueden desarrollar capacidades técnicas avanzadas. Su enfoque basado en evidencia revela que entre el 95% y 98% de los incendios son de origen antrópico, posicionando a la prevención como el camino más inteligente para la reducción de riesgos.
Panorama nacional: la realidad de los incendios en Paraguay
Los datos recopilados por el CBVP revelan una realidad compleja sobre la problemática de incendios en Paraguay. En 2024, la organización atendió 4,627 incendios de diferentes tipos, distribuidos en categorías que permiten identificar patrones y prioridades para la prevención:
Distribución por Tipo de Incendio (2024)
- Pastizales: 2,105 incendios (45.5%)
- Estructurales: 1,251 incendios (27%)
- Forestales: 95 incendios (2.1%)
- Otros tipos: 1,176 incendios (25.4%)
Evolución tecnológica: de la intuición a la gestión basada en datos
Una transformación fundamental del CBVP ha sido la implementación de sistemas informáticos para la gestión de datos. Desde 2021, la organización comenzó a desarrollar capacidades de recolección sistemática de información, logrando en 2022 establecer un sistema informático robusto operado desde la central de comunicaciones 132.
Alcance del Sistema de Información
- Cobertura: 140 cuarteles a nivel nacional
- Frecuencia: Reportes semanales de todas las actividades
- Diversidad: Registro de todos los tipos de servicios, no solo incendios
- Acceso: Información pública disponible en la página de la Comandancia Nacional
Modelo integral de gestión de riesgos de incendios
El CBVP ha adoptado un enfoque que integra las cuatro fases clásicas de la gestión de riesgos, adaptadas específicamente al contexto de incendios:
1. Prevención: La Estrategia Más Inteligente
La prevención de incendios es el camino más inteligente». El enfoque preventivo del CBVP se estructura en múltiples niveles:
Prevención Domiciliaria
- Revisión periódica de instalaciones eléctricas
- Verificación y mantenimiento de equipos de gas (reemplazo de mangueras cada 2 años)
- Orden y limpieza para reducir materiales combustibles
- Instalación de sistemas de detección autónomos
- Disponibilidad de extintores funcionales en hogares
Prevención Comunitaria
- Capacitación básica en primeros auxilios y RCP
- Charlas en colegios, empresas y comisiones vecinales
- Desarrollo de materiales gráficos educativos
- Sensibilización sobre riesgos específicos por zona
Prevención Rural y Forestal
- Control y monitoreo de quemas agrícolas mediante tecnología satelital
- Mantenimiento de sistemas cortafuego
- Limpieza de caminos y rutas de acceso
- Coordinación con INFONA para gestión integral del fuego
- Vigilancia comunitaria en zonas de riesgo
2. Preparación: Educación y Planificación
La preparación constituye un eje fundamental que incluye:
Formación Técnica
- Participación activa en la Red Nacional de Gestión de Riesgos
- Capacitación continua con estándares internacionales
- Especialización en manejo integral del fuego
- Actualización en técnicas de rescate y primeros auxilios
Planificación Territorial
- Elaboración de mapas de riesgo por zonas
- Identificación de rutas de evacuación
- Establecimiento de puntos de encuentro
- Coordinación con autoridades locales
Preparación Individual y Familiar
- Promoción de mochilas de emergencia
- Conocimiento de números de emergencia
- Identificación de salidas y rutas de escape
- Conocimientos básicos de autoprotección
3. Respuesta: Eficiencia y Coordinación
La respuesta del CBVP se caracteriza por:
Estructura Operativa
- 140 cuarteles con capacidad de respuesta diferenciada
- Sistema nacional de comunicaciones (132)
- Protocolos de activación según magnitud del evento
- Coordinación directa con la Secretaría de Emergencia Nacional
Modalidades de Activación
- Emergencias menores: Respuesta con guardias locales
- Emergencias medianas: Activación de cadenas de comunicación por WhatsApp
- Emergencias mayores: Movilización nacional con apoyo logístico de SEN
Ejemplo de Coordinación Mayor: Incendios del Chaco Durante los incendios de Chovoreca (2024), que duraron aproximadamente 20 días, la coordinación incluyó:
- Transporte aéreo de bomberos
- Logística de alimentación y combustible
- Notas de permiso laboral para voluntarios
- Coordinación interinstitucional continua
4. Recuperación: Restauración y Aprendizaje
La fase de recuperación involucra:
Colaboración Interinstitucional
- Trabajo conjunto con el Ministerio del Ambiente (MADES)
- Coordinación con INFONA para restauración forestal
- Apoyo a SEN en procesos de reconstrucción
Evaluación y Mejora
- Análisis de lecciones aprendidas
- Actualización de protocolos
- Mejoramiento de capacidades técnicas
Desafíos del voluntariado: sostenibilidad y reconocimiento
El CBVP enfrenta desafíos significativos relacionados con su naturaleza voluntaria. La Ley 6762/2021 obliga a los empleadores a otorgar permisos para emergencias, pero el cumplimiento es del 100% en el sector público y aproximadamente 50% en el sector privado. El perfil del voluntariado incluye mayormente profesionales activos que requieren formación continua (academia de 9 meses) con 50% de deserción debido a la alta exigencia.
Coordinación interinstitucional: un modelo de gobernanza
La coordinación con la Secretaría de Emergencia Nacional incluye línea directa de comunicación, coordinación de transporte y logística, apoyo en gestión de permisos laborales. Con INFONA se trabaja en control de quemas y tecnología satelital; con el MEC en programas educativos; y con municipios en coordinación territorial. La Ley Nacional de Bomberos establece una futura Superintendencia que centralizará datos estadísticos.
Lecciones para la gestión de riesgos basada en evidencia
La experiencia del CBVP ofrece lecciones valiosas para la gestión de riesgos:
- Los datos transforman estrategias La sistematización de información permitió identificar que los pastizales representan casi la mitad de los incendios, orientando esfuerzos preventivos específicos.
- La prevención requiere enfoque territorial Diferentes zonas requieren estrategias preventivas diferenciadas: urbana (instalaciones eléctricas), rural (quemas controladas), forestal (manejo integral).
- El Voluntariado necesita apoyo institucional La sostenibilidad del modelo voluntario requiere marcos legales que faciliten la participación y reconocimiento empresarial del valor social del servicio.
- La coordinación multiplica capacidades Ninguna institución puede abordar integralmente la gestión de riesgos de incendios; la articulación interinstitucional es fundamental.
- La formación continua es indispensable Los estándares técnicos en constante evolución requieren sistemas de actualización permanente para mantener la efectividad.
Perspectivas futuras: hacia un sistema nacional integrado
Consolidación del Sistema de Información
- Integración de datos de todas las instituciones de bomberos
- Desarrollo de indicadores nacionales de riesgo de incendios
- Implementación de sistemas de alerta temprana automatizados
Fortalecimiento de la Prevención
- Expansión de programas educativos comunitarios
- Desarrollo de normativas más estrictas para prevención
- Incentivos para adopción de medidas preventivas
Innovación Tecnológica
- Incorporación de drones para monitoreo y respuesta
- Desarrollo de aplicaciones móviles para reporte ciudadano
- Sistemas de modelamiento predictivo de riesgos
Profesionalización Gradual
- Desarrollo de esquemas mixtos voluntario-profesional
- Creación de incentivos laborales para voluntarios activos
- Fortalecimiento de marcos legales de apoyo
Reflexiones finales
El Cuerpo de Bomberos Voluntarios del Paraguay representa un modelo de cómo las organizaciones voluntarias pueden evolucionar hacia sistemas técnicamente avanzados sin perder su esencia comunitaria. Su transformación hacia la gestión basada en datos demuestra que la profesionalización de servicios de emergencia no requiere necesariamente la eliminación del voluntariado, sino su fortalecimiento con herramientas técnicas apropiadas.
La experiencia del CBVP ilustra claramente que la gestión efectiva de riesgos de incendios requiere un enfoque integral que vaya más allá de la respuesta a emergencias. Su énfasis en la prevención, basado en el reconocimiento de que más del 95% de los incendios son de origen humano, posiciona la educación y la cultura de prevención como elementos centrales de cualquier estrategia sostenible de reducción de riesgos.
Para otros contextos latinoamericanos, el modelo paraguayo sugiere que es posible construir sistemas nacionales efectivos de gestión de riesgos de incendios combinando voluntariado comprometido, tecnología apropiada, coordinación interinstitucional y políticas públicas de apoyo. En una región donde los recursos para servicios de emergencia son frecuentemente limitados, esta experiencia ofrece una alternativa viable que maximiza el impacto social del compromiso ciudadano organizado.
Sobre el Autor →
Marco Almada es Primer Comandante Nacional del Cuerpo de Bomberos Voluntarios del Paraguay. Con amplia experiencia en gestión de emergencias y administración de sistemas voluntarios, lidera la estrategia operativa de una organización de 140 cuarteles que brinda servicios de emergencia en todo el territorio nacional, especializándose en gestión integral de riesgos de incendios.